El tiempo no nos defraudó en la compañía de tomar el sol fuimos a recorrer la casa, Mazapán museos y otras atracciones locales.
Cansados pero contentos, volvimos al camping, poplażować y con ganas de nadar en el lago Balaton. Maciek anotó empapando mi intento de ir a la corte de agua y acabados a mano, la pierna y la nariz mojada – nie wiem jak to zrobiłam 😉 I tyle było pływania.
Nuestro idilio se vio interrumpida por la llegada de las pandillas juveniles de Hungría, que sin piedad a gritos, dejar de lado las piezas de la parte delantera 20 años (Bon Jovi) y quizás a balowała 3 mañana. Hemos decidido dejar el campamento e ir más lejos 60 kilómetros a lo largo las playas del lago Balaton, en busca utęsknionych.